EDITORIAL

COVID 19

Época COVID 19, ha revelado que el mundo es pequeño; que las distancias sólo son una ilusión del pasado; que en el mundo ya no hay lugar para los chauvinismos; que las fronteras no significan nada frente a la amenaza de un virus aparecido en hasta diciembre del 2019 desconocida en Wuhan, provincia de Hubei, China, que fue capaz de viajar por todo el planeta tierra y poner en riesgo existencia de la humanidad, enfermando a dieciséis millones dieciocho mil quinientos cuarenta y tres personas (16 018 543) y matando a seis cientos cuarenta y cuatro mil seis cientos cuarenta y tres (644.643) todos estos datos son dados por la Universidad la Universidad Johns Hopkins (Baltimore, EE. UU)

La tercera ley sobre el comportamiento mecánico en física, de Newton, según la cual a toda acción le corresponde una reacción. A toda acción le corresponde una reacción igual, pero de sentido contrario; también es aplicable para afrontar al COVI 19 y a toda situación que amenace existencia del Hombre. Estamos frente a un solo virus que atacó a toda la Humanidad; entonces, toda la Humanidad debe unirse para atacarlo.

Pero, esta “ley”- que aparentemente es de fácil aplicación- reclama la unidad de criterios de todos los seres humanos o por lo menos de los mandatorios de todas las naciones del mundo, cada uno de ellos con su propia doctrina e ideología política, algunas contradictorias entre sí; tanto es así, que, en plena pandemia, la Organización Mundial de la Salud se atrevió a pedir un "alto el fuego mundial" que detenga todas las guerras para ayudar a hacer frente, sin que se haya conocido respuesta a tal petición.

Varios países pugnan por descubrir la vacuna contra el COVID 19, esto es alentador porque genera la esperanza de que finalmente se descubrirá el antídoto contra ese mal. La noticia mencionada líneas arriba invita a pensar en la urgencia de motivar la investigación en las aulas universitarias peruanas.

Dra. Gioconda del Socorro Sotomayor Nunura