PIEL DE CERDO LIOFILIZADA EN TRATAMIENTO DE QUEMADURAS:SERIE DE CASOS 2014-2016
LYOPHILIZED PORK SKIN IN BURN
TREATMENT: CASE SERIES 2014-2016
Enrique Rafael Franco de la Cuba[1]
Jessica
Haydee Saravia Alviar[2]
Paul
Rubén Alfaro Fernández[3]
Fecha de recepción: 13 de febrero 2020
Fecha de aprobación: 25 de junio 2020
DOI: https://doi.org/10.26495/tzh.v12i3.1329
Resumen
Objetivo: Describir la evolución de pacientes quemados con tratamiento
quirúrgico de piel de cerdo liofilizada en el Hospital Nacional Luís Nicasio Saenz del Perú año 2014 al 2016. Metodología: Estudio descriptivo, tipo Serie de Casos. La
recolección de datos fue de las historias clínicas, se incluyeron los casos de
pacientes con quemadura cuyo tratamiento fue cirugía con piel de cerdo
liofilizada que tenían datos clínicos completos sobre el tiempo operatorio y de
hospitalización, así como la evolución de cada uno de ellos. Se incluyó a todos
los pacientes durante los años 2014 al 2016 que llegaron a 60 casos. Resultados: El 75% de las quemaduras
fueron causadas por líquidos calientes, la media de la Superficie Corporal
Quemada (SCQ) fue de 8.83%, se hospitalizó el 63.3% de pacientes, el 96.7% de
lesiones no se infectaron, la duración en días promedio de hospitalización fue
de ocho, 2.5 operaciones por paciente. Con recuperación total estética de 41.7%
y funcional de 91.7%. Con sensación de bienestar luego del tratamiento 98%. Conclusión:
Este tipo de tratamiento fue de beneficio para los pacientes del estudio.
Palabras clave: Piel de cerdo liofilizada, tratamiento quirúrgico,
sustitutos de piel.
ABSTRACT
Objective: To describe the evolution of patients burned with
freeze-dried pig skin surgical treatment at the Luís Nicasio
Saenz National Hospital in Peru from 2014 to 2016. Methodology: Descriptive,
case series type. The data collection was from the medical records, including
the cases of burn patients whose treatment was surgery with lyophilized pig
skin that had complete clinical data on the operating time and hospitalization,
as well as the evolution of each one of them. All patients were included during
the years 2014 to 2016 that reached 60 cases. Results: 75% of burns were caused
by hot liquids, the mean Burned Body Surface (SCQ) was 8.83%, 63.3% of patients
were hospitalized, 96.7% of injuries were not infected, the duration in days
Average hospitalization was eight, 2.5 operations per patient. With total
aesthetic recovery of 41.7% and functional of 91.7%. With a feeling of
well-being after treatment 98%. Conclusion: This type of treatment was of
benefit to the study patients.
Keywords: Burns treatment, freeze-dried pigskin, skin
substitutes
1. Introducción
En
el mundo se producen aproximadamente ciento ochenta mil muertes al año por
causa de quemaduras, en Estados Unidos de Norte América al año se presentan quinientos
mil casos de quemadura, 40 000 hospitalizaciones, y 3400 muertes; y en los
países de desarrollo medio y bajo, las quemaduras constituyen la tercera causa
de muerte accidental. La OMS reconoce que la supervivencia ha mejorado en un
97%, debido a nuevos tratamientos instaurados, sin embargo, recomienda su revisión
permanente, orientándolos a disminuir las secuelas posteriores al accidente de quemadura.
(Organización Mundial de la Salud, 2018).
En
Perú, se reportan más de 15 000 niños casos de quemaduras, siendo los líquidos
calientes son la causa más frecuente, la mayoría (70%) son niños, principalmente
menores de cinco años y alrededor del veinte por ciento tienen secuelas para
toda la vida. (Andina, 2018). Un quemado generalmente tarda en recuperarse
semanas o meses, teniendo dolor, sufrimiento físico y psiquico,
su tratamiento y cuidado ocasiona grandes costos y sufrimiento para el Estado y
su familia. (Martín y Piris, 2014). La morbilidad y mortalidad aumentan por la
presencia de infección y por las heridas profundas que se presentan por la
pérdida de la humedad de los tejidos expuestos por la quemadura.
En
el Perú el médico Augusto Bazán Altuna realizó el primer trasplante de piel de
cerdo fresca, en niños con quemaduras de tercer grado del Hospital del Niño de
Lima del año 1964. Años más tarde, en 1997, se funda el primer Banco de Tejidos
del Perú, en el INSN (Instituto Nacional de Salud del Niño) asociados con el
Instituto Nuclear de Lima. En dicha institución se empieza a esterilizar los
tejidos con radiación gamma, empleando equipos donados por la Organización
Internacional de Energía Atómica. A partir de 2008, con la colaboración del
Organismo Nacional de Donación y Trasplante (ONDT), hacen que el Banco de
Tejidos del INSN tenga la capacidad de producción para abastecer con piel de
cerdo liofilizada a hospitales del Minsa, Essalud, FF.AA.
y Policía Nacional del Perú; sin embargo, hasta la fecha no existen convenios entre
dichas instituciones, siendo importante difundir su uso. (MINSA, 2017).
El grado elevado de infecciones
intrahospitalarias en nuestro país produce el incremento de estancia
hospitalaria y de la demora en su curación, esto se presenta por el uso del
tratamiento convencional de las quemaduras extensas y profundas con el uso de
gasas parafinadas con antibióticos aplicados tópicamente, colocadas en
curaciones diarias, que generan también sufrimiento de los pacientes. Frente a
ello, en nuestro hospital se ha implementado desde el 2011 un protocolo de
intervención quirúrgica en emergencia, que es motivo de la descripción en este
estudio.
Cabe
mencionar como antecedentes los estudios de: Bromberg, Song
y Mohn, (1965) quienes recomendaban el uso temporal
de la piel de cerdo en quemaduras profundas o de tercer grado en seres humanos.
Al respecto, Artz, Rittenbury
y Yarbrough(1972) compararon el uso de alo-injertos
(injertos de la misma especie) y xeno-injertos (injertos
de otra especie), reportaron poca diferencia entre ambos procedimientos,
respecto a la limpieza del área de granulación, prevenir la pérdida de agua y
proteínas, disminuir el dolor y el riesgo de infección; además de las mayores
facilidades de disponibilidad de insumos para los xeno-injertos,
especialmente, la dermis del cerdo.
Chatterjee, D. (1978) realizó un estudio
comparativo entre dos grupos de pacientes quemados: el primer grupo fue tratado
con injerto de piel porcina y el segundo grupo con tratamiento convencional de
gasa parafinada, reportó una mejor media de tiempo de curación en el grupo con
piel de cerdo , respecto al tratamiento convencional, además
de otros efectos del xeno-injerto de cerdo: reducción
del dolor y de la infección. En términos económicos, el autor afirmó que, para
la misma extensión de SCQ, el costo de la piel porcina fue un tercio del costo
del apósito parafinado.
Reyes,
et al. (2011) destacaban los beneficios de los xeno-injertos
debido a características similares de la piel humana: densidad, engrosamiento
de dermis, con la piel de algunas especies (ovino, bovino, porcino, piel de
rana entre otros); por lo que obtuvieron apósitos liofilizados de piel de cerdo
a escala de laboratorio en el Banco de Tejidos Radio-esterilizados (BTR) de
México, con la finalidad de producir a escala comercial, cubiertas temporales
de piel (apósitos) deshidratados por liofilización.
Un aspecto
aún en debate, es el tiempo en el que se debe realizar el tratamiento de la
quemadura de tercer grado, Jackson, D, et al. destacaban en 1960, la importancia
de una temprana limpieza quirúrgica y retiro del tejido muerto, asegurando un
buen manejo del shock en un gran quemado. Reyes, et al. (2011), Maslauskas, et al. (2005) realizaron un estudio
comparativo, prospectivo de la cirugía temprana y tardía en quemaduras de la
mano, reportaron mayor recuperación, menor deficiencia de la función de la mano
y un mayor tiempo de recuperación de la funcionalidad de la mano en la cirugía
temprana.
En el 2012, Mansoor,
Mahmoud, realizaron un ensayo clínico aleatorizado
para evaluar la eficacia de la cirugía temprana o tardía en 80 niños quemados;
reportaron que el tratamiento quirúrgico temprano (escisión e injerto de piel) reduce
la septicemia y otras complicaciones de las quemaduras, son mejores los
resultados cosméticos y minimiza la necesidad de cirugía reconstructiva
secundaria y afecta el costo de tratamiento al reducir la estadía hospitalaria.
Saaiq, Zaib y Ahmad, (2012) realizaron
un estudio observacional prospectivo, con 120 pacientes con quemaduras
profundas y hasta 40% de la SCQ, compararon los efectos del tratamiento
quirúrgico (escisión e injerto) temprano VS tardío, reportaron diferencias
significativas en favor de las cirugías tempranas, ventajosas y favorables
respecto al manejo tradicional.
Afirman que la cirugía temprana, dentro de los cuatro a siete días de ocurrido el accidente fue óptimo y favorable
en su estudio, sin embargo, concluyen que el momento óptimo para el primer
tratamiento quirúrgico continúa siendo un tema debatible.
Maimbo, Jovic
y Odimba, (2014) realizaron un estudio comparativo,
de intervención, prospectivo no aleatorio, en el 2014 para demostrar beneficios
en cirugías tempranas y explorar diferencias según estancia hospitalaria, infección
y presencia de contractura en pacientes con quemaduras profundas, encontraron
diferencias significativas a favor de la cirugía temprana, respecto a la
estadía hospitalaria y el riesgo de infección. Un problema en África es la
actitud ante el aseo quirúrgico y los injertos, pues todavía, es considerado
como un daño adicional al paciente.
Ayaz M, et al. (2014) realizaron un ensayo clínico no
aleatorizado para comparar los resultados de pacientes iraníes con SCQ no menos
del 15%, sometidos a tratamiento quirúrgico temprano y tardío; sostienen que en
pacientes con dicha SCQ, la intervención temprana se asocia con mayores tasas
de aceptación del injerto; sin embargo, la duración de la estancia
hospitalaria, la picazón y la formación de cicatrices es similar respecto a la
cirugía tardía.
El
tratamiento quirúrgico temprano incluye, la limpieza y extirpación tangencial
del tejido quemado (escarectomía). Dos revisiones
sistemáticas, una realizada por Rowan, et al. (2015) y la otra, por Gacto- Sánchez P, (2017), coinciden en destacar los
beneficios la escisión quirúrgica de los tejidos necrosados a escara por
contener abundante proteínas desnaturalizadas y vasos cutáneos coagulados,
reduciendo el riesgo de infección, desecación y profundización de las heridas y
los beneficios que ofrecen los xeno-injertos como
coberturas temporales, respecto a la cicatrización y epitelización de las áreas
lesionadas.
El
objetivo de esta investigación es describir la evolución clínica de los pacientes
quemados que han sido intervenidos con uso de Piel de Cerdo Liofilizada en el
Hospital Nacional Luís N. Sáenz,
Los
resultados del estudio nos pueden mostrar la replicabilidad, factibilidad y
facilidad del procedimiento quirúrgico, pues dichos procedimientos (limpieza
quirúrgica y escarectomía) son actos médicos posibles
de ser realizados como parte de los procedimientos en un servicio de emergencia,
con los equipos, insumos y con el recurso humano, usualmente disponibles en las
áreas de emergencia hospitalaria.
2.
Material y métodos
Diseño
y población de estudio
Es una investigación descriptiva,
retrospectivo, tipo serie de casos que han sido intervenidos quirúrgicamente
desde el 2014 a 2016. El tamaño de la
muestra es de 60 pacientes que cumplieron los criterios de intervención.
Recolección y análisis de datos
Se realizó el levantamiento de los
datos de las historias clínicas y reportes operatorios, el análisis de
frecuencia fue realizado con SPSS
Respecto a los aspectos demográficos, la edad media fue de 36.7 años, con
un año como edad mínima y 83 como edad máxima, según grupos etarios el 28%(17) eran
adolescentes, el 51.7%(31) eran adultos y un 20%(12) de adultos mayores. Según
sexo el 53.3% (32) fueron mujeres y 46.7% (28) varones.
Respecto a la variable peso, el 68.3%(41) tenían el peso normal o
sobrepeso, el 1.7% (1) de bajo peso y un 30% (18) con obesidad. Respecto a
comorbilidad el 20%(12) tenía una comorbilidad, en el 10% (6) de ellos, estaba
afectado de diabetes mellitus, el
3.3%(2) tenía coagulación patológica y un 6.7%(4) referían comorbilidades
múltiples.
Tabla
1
Características
clínicas de los casos que fueron intervenidos.
|
Característica |
|
Agente
que origino la quemadura |
75%
(45) Líquidos |
Fuego
20% (12) Explosivos
3.3% (2) Más
de uno 1.7% (1) |
%
de SCQ |
8.83%
SCQ (media) Rango
1% a 50% |
SCQ
< 10% 75% (45) SCQ
>10% y 20%< 13.3% (8) SCQ
> 20% 11.7% (7) |
Grado,
Profundidad |
2do
grado 60% (36) Intermedio
53.3% (32) Superficial
6.7% (4) |
Tercer
grado 26.7% (16) Cuarto
grado 13.3% (8) |
Tabla
2
Procesos
quirúrgicos de la intervención
|
Procesos |
|
Periodo preoperatorio |
< 12 horas 63.3% (38) |
Entre 12 a 24 horas 25% (15) > de 24 horas 11.7% (7) |
Tratamiento Ambulatorio |
36.6% (22) |
|
Tratamiento con Hospitalización |
< 14 días 43.3% (26) |
>14 días 20% (12) |
Fuente:
Elaboración propia
Tabla
3
Características
de la intervención quirúrgica
|
Número |
Valor mínimo |
Valor máximo |
Valor promedio |
DE. |
Horas de ingreso a sala de operaciones |
60 |
1 |
48 |
11.70 |
11,581 |
Número de operaciones |
60 |
0 |
4 |
1.50 |
0.725 |
Número de curaciones |
60 |
0 |
13 |
2.53 |
2.205 |
Tiempo en días hospitalizados |
60 |
0 |
47 |
7.98 |
10.151 |
Total |
60 |
|
|
|
|
Fuente: Elaboración propia
Tabla
4
Características
clínicas post intervención
|
Principal |
Secundarios |
Xeno Injerto |
100% (60) |
Piel de Cerdo
Liofilizada |
Autoinjerto |
43.3 % (26) |
Parcial y/o Total |
Dolor durante el tratamiento |
83.3% (53) Lo calificaron como soportable. |
Intenso 10% (6) Insoportable 1.7%
(1) |
Infección |
96.7% (58) No presentaron |
Infección Local
3.3% (2) |
Anemia |
76.7% (46) No presentaron |
Presentaron 23.3%
(14) |
Complicaciones |
91.7% (55) No presentaron |
Infección 3.3% (2) Inmuno-hematológicas 3.3% (2) Pulmonar 1.7% (1) |
Fuente:
Elaboración propia
Tabla 5
Características clínicas a largo
plazo de los pacientes intervenidos
|
Características |
|
Estética |
41.7%
(25) total |
Pigmentación
30% (18) Calidad
1.7% (1) Cicatriz
leve 26.7% (26) |
Funcional |
60%
(36) No secuelas |
Cicatriz
moderada 31.7% (19) Cicatriz
Retráctil 5% (3) Cicatriz
Invalidante 3.3% (2) |
Psicológico |
58.3%
(35) agradecido |
Contento
40% (24) Sufrimiento
1.7% (1) |
Fuente: Elaboración propia
4.
Discusión
Hay consenso desde
hace varias décadas, en los xeno-injertos, vale decir,
la utilización temporal de la piel de otra especie, en quemaduras de tercer
grado en seres humanos; evidencias mencionan que el uso de este tipo de apósito
biológico, especialmente la dermis del cerdo, cambiados aproximadamente cada 2
a 3 días, prepara al área receptora para el auto-injerto; su uso motivó
esfuerzos institucionales de bancos de tejidos por mejorar los procesos de
producción de cubiertas temporales de
piel de cerdo (apósitos biológicos deshidratados). (Bromberg, Song y Mohn, 1965) (Artz, Rittenbury y Yarbrough,
1972).
En el presente estudio, el 100% (60 pacientes) recibieron xeno-injerto con piel de cerdo liofilizada (PCL), el 83.3%
(53) calificaron el dolor como soportable, 10% como dolor intenso, un 1.7% como
dolor insoportable, el 96.7% (58) no presentaron infección y 8 días fue la
media de hospitalización. Chatterjee, (1978)
comparó el tratamiento de 28 pacientes: trece pacientes fueron tratados con
injerto de piel porcina y 15 fueron tratados convencionalmente con gasa parafinada;
sus resultados mostraron una media del tiempo de 13 días de curación, favorable
al grupo con xeno-injerto de piel porcina, en
comparación con la media de 28 días de curación en el grupo de control; la
reducción del dolor y de la infección fueron mucho mayores en el grupo xeno-injerto que en el tratamiento convencional. En ese
mismo sentido, Reyes
et al. (2011) reafirmaban los beneficios de los xeno-injertos
gracias a las características similares de la piel algunas especies (ganado
ovino, bovino, porcino, la piel de rana, entre otros) con la piel humana.
El tratamiento
quirúrgico de las quemaduras profundas y de tercer grado (escarectomía
e injerto PCL) fue realizado en un tiempo menor a 12 horas, el 63.3% ingresaron
a sala de operaciones antes de las 12 horas de ocurrido el accidente, el 25%
entre 12 a 24 horas y un 11.7% entró a cirugía pasadas las 24 horas, si bien la
mayoría (76.7%) no tuvieron anemia, un 23.3% si hicieron anemia. Jackson, et al
(1960) sostenían la importancia de la precoz extirpación tangencial del tejido
quemado, garantizando el tratamiento adecuado y oportuno del shock que implicaba,
el monitoreo del volumen total de sangre del paciente, vigilando la estabilidad
de los signos vitales, los valores del hematocrito y la capacidad productiva de
orina; criterios estrictamente vigilados que orientan la administración oportuna
de sangre y hemoderivados.
El tiempo posterior
al accidente para realizar el tratamiento quirúrgico (limpieza e injerto) es un
aspecto incierto y un tema aún en debate. Factores como, el sangrado, el efecto
des-compensatorio que produce este procedimiento y la falta de área dadora para
la cobertura total SCQ en un gran quemado, son aspectos que lo ponen en duda. Maslauskas, et al. 2005) compararon la cirugía temprana y
tardía en 79 pacientes a quienes se les realizó tratamiento quirúrgico (necrectomía y plastía temprana)
por quemaduras de la mano; reportaron que los factores relacionados a la
deficiencia de la función de la mano dependían de la edad, del área de la
quemadura y el tiempo transcurrido desde que ocurría la lesión hasta su llegada
al hospital, reportaron también que, a los 12 meses, la funcionalidad (fuerza del pellizco de los dígitos y el
agarre de la mano) fue mayor en el grupo de cirugía temprana, a los tres meses, la fuerza medida era mayor
en el grupo de cirugía temprana; según sexo, en el grupo cirugía temprana, los
hombres recuperaron hasta un 76% de su fuerza y las mujeres un 61%, en
comparación al grupo de cirugía tardía: 60.8% de varones y 39.36% de mujeres
recuperaron la fuerza de sus manos. Concluyeron que las deficiencias de
manos y brazos a los doce meses, en el grupo temprano fue del 12%, en
comparación al 23 y 26.5% de deficiencia en mano y brazos respectivamente en el
grupo de cirugía tardía.
En el presente
estudio, según el factor edad, la edad
media de la población fue
36.7 años y según grupos etarios el 28%(17) eran adolescentes, el 51.7%(31)
eran adultos y un 20%(12) de adultos mayores; según factor SCQ, el 75% tuvo
menos del 10% de SCQ, el 13.3% tuvo entre el 10 y 20% de SCQ y un 11.7% tuvo
más del 20% de SCQ; en el aspecto funcional en el largo plazo, en el
presente estudio, el 60% no quedaron con secuelas, un 5% tuvo cicatriz
retráctil y un 45% quedaron con cicatriz afectando mínimamente su funcionalidad;
el 90% de pacientes en el presente estudio, al final del tratamiento refirió sensación
de bienestar (contento y/p agradecimiento).
Otro estudio relacionado al tiempo del tratamiento quirúrgico
y su ventajas, fue un ensayo clínico aleatorizado, realizado
por Mansoor, Mahmoud El Harrazin,
(2012) realizaron, con el objetivo de evaluar la eficacia de la cirugía
temprana o tardía en 80 niños quemados, el grupo caso fueron 30 niños con
intervención quirúrgica temprana (limpieza e injerto) y el grupo control fueron
50 niños quemados con cirugías similares tardías; reportaron un porcentaje
medio de aceptación de injerto de 96.67% VS 88.4% del grupo temprano y tardío,
respectivamente; con relación a complicaciones posoperatorias, en el grupo
temprano hubo 26% de rechazo al injerto, menor al 48% en el grupo tardío, las
contracturas posoperatorias se dieron en el 8% del grupo tardío y la estancia
hospitalaria media fue de 13.66 días para la cirugía temprana, en comparación
de los 37.46 días en el tratamiento tardío.
Saaiq, et al. (2012) también
evaluaron los efectos de la cirugía temprana VS la cirugía tardía en 120 pacientes
de ambos sexos y todas las edades que tenían hasta el 40% de la SCQ;
conformaron dos grupos: la mitad de los pacientes se sometieron a cirugía
temprana (escisión temprana y autoinjerto) dentro de los 4 a 7 días posteriores
al accidente, los otros 60 se sometieron a cirugía similar, pero tardía,
después de 1 a 4 semanas posterior al accidente. Los grupos fueron similares:
entre 28 y 29 años de edad media, la mayor proporción fueron varones que
mujeres y en ambos grupos tenían un 30.6% de SCQ; los resultados según
variables de estudio fueron: 1) Positividad del cultivo de las heridas (en el
grupo temprano, en un caso hubo crecimiento de microrganismos), a diferencia
del 35 casos en el grupo tardío, con crecimiento de microrganismos (p<0.05),
2) la aceptación del injerto (en el grupo temprano fue significativamente mejor
que en la cirugía tardía) 3) duración de la hospitalización posterior al
injerto (hubo un acortamiento significativo de la estancia hospitalaria
posterior a la cirugía temprana) y 4) la mortalidad estuvo directamente
asociada al crecimiento de microorganismos, causantes de graves infecciones
aumentando significativamente la probabilidad de muerte por sepsis.
En el presente estudio, la causa principal del 75% de
quemaduras en el presente fue líquidos calientes, seguida por fuego y explosivos
con un 12% cada una, con respecto a la SCQ, en el 75% fue menor al 10%, en el
13.3%, la SCQ fue menor mayor de 1º y menor del 20% y en el 11.7% la SCQ fue
mayor del 20%. En el estudio de Maimbo, et al. (2014)
realizado en pacientes africanos con quemaduras profundas; reportaron que los
líquidos calientes también fue la primera causa con un 57%, seguida de fuego y
alimentos calientes con 27% y 14%, respectivamente; y respecto a la SCQ media
fue de 14%; a pesar de que llegaron al hospital dentro de las 24 horas, los
pacientes y sus familias no aceptaban los injertos, por falta de comprensión
del procedimiento. Las diferencias entre tratamiento quirúrgico (limpieza e
injerto) temprano y tardío fueron significativas: en el grupo tardío, la
estadía hospitalaria fue mayor (p: 0.001), la infección más alta [Chi cuadrado:
4.510, (p: 0.034)], y la formación de contracturas en ambos grupos fue similar
[Chi cuadrado: 0.999, (p: 0.258)].
Teniendo en cuenta la SCQ, el estudio de Ayaz,
et al. (2014) realizado en Irán, comparó dos grupos de pacientes con menos del
15% de SCQ, 27 recibieron tratamiento quirúrgico (limpieza e injerto) temprano
y otro grupo similar, la cirugía fue tardía, ambos grupos fueron seguidos por
seis meses; su resultados fueron: la tasa de aceptación del injerto fue
significativamente mayor en el grupo temprano (96.88% VS. 92.88%; p: 0.033),
mientras que no se encontraron diferencias significativas según estancia
hospitalaria, puntuación de picazón y
formación de cicatrices . El presente estudio respecto a la SCQ: en el
75% fue menor al 10%, en el 13.3%, la SCQ fue menor mayor de 1º y menor del 20%
y en el 11.7% la SCQ fue mayor del 20%, el 100% recibió injerto con piel de
cerdo liofilizadas y además un 43.3% tuvo autoinjerto, el 91.7% no tuvo
complicaciones, el 60% no tuvo secuelas, solo 3.3% tuvo cicatriz invalidante y
el 5% cicatriz retráctil.
Los procedimientos que se hicieron tempranamente son la escarectomía tangencial quirúrgica, que consiste en la
limpieza evitando la contaminación e infección intrahospitalaria, se produce
una vasoconstricción que se aprovecha para obtener lecho cruento húmedo sin
sangrado y luego cubrir con piel de cerdo liofilizada rehidratada con
antibiótico en toda el área superficial de la quemadura. Luego en sala de
operaciones con anestesia general, se hace una limpieza profunda y se realiza
la escarectomía tangencial hasta ubicar tejido húmedo
y cubrir la lesión con piel de cerdo liofilizada rehidratada.
Respecto al
tratamiento de quemaduras profundas, Rowan, et al. (2015) hicieron una revisión
sistemática y sostienen que la
escisión temprana y el injerto se han convertido en el estándar de oro para el
tratamiento de quemaduras de espesor medio y profundo, porque ayuda a reducir
el riesgo de infección, desecación y profundización de las áreas lesionadas.
Gacto-Sánchez,
(20117) en una revisión sistemática, sostiene que los pacientes con quemaduras
extensas requieren frecuentemente, cobertura temporal con un aloinjerto, xeno injerto, sucedáneo de la piel o algún equivalente
dérmico, favoreciéndose de esta
manera, la cicatrización y epitelización de las áreas lesionadas, preparándola
para el auotinjerto; además, dichas coberturas
temporales protegen las áreas dadoras evitando superficies cruentas expuestas.
Los procedimientos
quirúrgicos mencionados son parte del protocolo del tratamiento quirúrgico de
emergencia del paciente quemado desde el año 2011 en el Hospital Nacional Luis
N. Sáenz. En este mismo sentido, Villegas, et al. (2010) describieron el
tratamiento médico-quirúrgico brindado en la unidad de quemados a 88 pacientes
chilenos tratados entre el 2005 y 2006; concluyen que, el protocolo terapéutico
médico y quirúrgico en el servicio de quemados de un hospital público de
urgencias, contribuyó a disminuir la mortalidad global de los pacientes
quemados.
Mencionar que el
presente estudio recoge la experiencia de cirujanos plásticos y equipos de
salud peruanos, que brindan tratamiento médico quirúrgico y atención integral,
empleando como recurso, la PCL producida en nuestro medio. Al respecto, Boyce, y
Lalley, (2018), sostienen que la ingeniería de
los sustitutos biológicos de piel para el cuidado de heridas ha progresado y
que la piel de cerdo
liofilizada es un recurso que se utilizará como sustituto de piel temporal,
pues al separar el medio externo y el medio interno, evita la infección y
favorece la re-epitelización y cicatrización, útil
tanto para cubrir los cultivos de células epidérmicas autólogas mientras se desarrollen
plenamente en la re-epitelización. Armor, et al. (2006) al evaluar in vitro la adherencia, proliferación y migración
de fibroblastos en matriz dérmica acelularizada de
cerdo, también reconoce su utilidad en la calidad de la cicatrización
debido a sus propiedades biofísicas que proporcionan pero que no aíslan el
medio interno.
Cierto es también,
que el progreso tecnológico investiga y desarrolla otras tecnologías como el
cultivo de células madre de queratinocitos, fibroblastos dermales, células
mesenquimales, células madre pluri-potenciales, proporcionadas
en forma de autoinjerto cultivados o en suspensiones acuosas mejorarán los
resultados definitivos. Li y Maitz, (2018) sin
embargo, afirman que actualmente hay limitaciones en tiempo, costo y la
utilidad de los xeno injertos, especialmente de piel
de cerdo, es útil y económica.
5.
Conclusiones
·
El
uso de la piel de cerdo liofilizada (PCL) es útil y beneficiosa en el
tratamiento quirúrgico de emergencia del paciente quemado, pues mejora el curso
clínico del paciente y de la lesión.
·
La
cobertura total y temprana de la lesión con PCL, independiente del área quemada,
del aseo y escarectomía tangencial quirúrgica de toda
la DCQ, no requiere área dadora ni de un lecho sangrante para adherirse,
difiere el autoinjerto definitivo y permite la repetición del procedimiento
inicial antes, durante y después de la estabilización del paciente. Los efectos
del uso temporal de PCL en las quemaduras son: disminución significativa del
riesgo de la contaminación, infección, desecación y profundización intra
hospitalaria de la lesión, disminuyendo el área SCQ que necesite autoinjerto, evitando
la pérdida de líquidos a través de la SCQ; además de cubrir el lecho dador,
disminuir el tiempo de hospitalización, el número de curaciones y la calidad de
vida del paciente.
·
La
modificación en el tratamiento quirúrgico temprano realizada redujo los días de
contaminación de la quemadura y la desecación de los tejidos expuestos; de esa
manera, disminuyó el riesgo de infección y profundización de la SCQ,
disminuyendo a su vez, la necesidad de auto injertos o hacerlo en una menor superficie
y tiempo; además, de disminuir la intensidad del dolor, el sufrimiento psicológico,
y obtener mejores efectos funcionales y estéticos.
·
Los
procedimientos quirúrgicos tempranos en el tratamiento de las quemaduras son
factibles y fáciles de realizar en el contexto de un servicio de salud peruano;
las similares características físicas, sociales y culturales de los pacientes,
procedimientos sencillos, equipo e insumos quirúrgicos, condiciones
hospitalarias similares y recurso humano comprometido, hacen posible su
replicabilidad.
6.
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[1] Médico Cirujano. Cirujano
General, Cirujano Plástico Hospital Nacional Luis Nicasio Sáenz, Lima-
Perú, enriquefrancodelacuba@gmail.com,
[2] Doctor en Salud Pública. Cirujano
General, Cirujano Plástico Jefe del Departamento de Cirugía Plástica del
departamento de Cirugía Plástica del Hospital Nacional Luis Nicasio Sáenz, Lima-
Perú, Docente
de la USMP
[3] Doctor en
Medicina. Docente Investigador de la Universidad Señor de Sipán, Pimentel – Chiclayo,
Perú. afernandezpaulr@crece.uss.edu.pe,